Se trata del primer viaje oficial de un monarca noruego a la Argentina en medio siglo, que se da en una "situación de optimismo y creciente interés" para fortalecer la relación económica, explicó este miércoles el embajador de Noruega en Argentina, Jostein Leiro, en un encuentro con periodistas.
Los reyes llegarán acompañados además de autoridades como la ministra de Relaciones Exteriores, Ine Eriksen Søreide, y el titular de Comercio, Torbjøn Røe Isaksen, cerca de 60 empresarios que representan a unas 40 sociedades del país escandinavo.
"Queremos ofrecer a los empresarios noruegos y argentinos una oportunidad de encontrarse y tener mejor información de lo que tenemos para ofrecer de Noruega a Argentina y viceversa", remarcó el diplomático.
Entre las empresas que participarán se encuentran la aerolínea Norwegian -que recientemente inició sus operaciones en Argentina-, las energéticas Statoil -producción de petróleo y gas y Scatec -solar-; y Hurtigruten, especializada en cruceros de expedición y turismo polar.
La primera jornada del rey Harald estará marcada por la reunión bilateral con Macri en la Casa Rosada, que estará precedida por la colocación de una ofrenda floral en el monumento del libertador José de San Martín en la plaza que lleva el mismo nombre.
Tras un almuerzo de Estado encabezado por el presidente, los monarcas acudirán al Congreso, donde se reunirán con la vicepresidenta del país y titular del Senado, Gabriela Michetti.
También visitarán la Corte Suprema de Justicia, para acabar el día cenando en un encuentro organizado por Innovation Norway en un club del selecto barrio de Puerto Madero.
La sede de la Cancillería argentina acogerá ya el día 7 un seminario de negocios que llevará por nombre "Una nueva alianza para la creación de valor", y que contará con discursos de, entre otros, la reina Sonia. Actualmente 20 son las empresas noruegas presentes en Argentina.
En 2017, las exportaciones argentinas a ese país llegaron a los 60 millones de dólares, mientras que las de la nación escandinava a la austral ascendieron a 125 millones.
"Existe un gran potencial para crecer, con la voluntad que tienen las empresas noruegas de invertir", subrayó el embajador, quien indicó que "todavía queda mucho que hacer" y sigue habiendo desafíos, como la percepción que todavía hay "del nivel de corrupción, que preocupa a los inversores".
"Pero es positivo que Argentina en el último año ha mejorado su posición en el índice de anticorrupción de Transparencia Internacional", aseveró.
Jostein Leiro detalló que su país agradece el "rol tan activo" que está teniendo Argentina en el ámbito internacional.
"Y coincidimos en muchos puntos de vista clave como la necesidad de una mayor cooperación internacional para solucionar los desafíos que tenemos en común, fortalecer las organizaciones internacionales y los beneficios del comercio mundial", añadió.
Un homenaje a las víctimas de la última dictadura argentina (1976-1983) y un foro sobre la relación de Noruega y el país austral en la Antártida formarán parte de la agenda de los reyes en su segundo día en Buenos Aires, que se completará con el recibimiento de las "llaves de la ciudad", una reunión con miembros de la colectividad noruega -compuesta por unos 300 ciudadanos- y una cena en una casa histórica de la ciudad.
El último día, antes de volver a Oslo, los reyes participarán en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza, junto a Buenos Aires, de la apertura oficial de actividades de Norwegian y disfrutarán de un asado argentino en una típica estancia gaucha.
El último monarca noruego en viajar a Argentina fue el rey Olav, padre de Harald, en 1967. Esta será la segunda ocasión en que Harald, de 81 años, y Sonia, de 80, viajen de forma oficial a un país sudamericano, después de haber estado en Brasil en 2003.
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